Algunos comportamientos comunes y frecuentes que abonan el suelo de la discordia y el odio en la familia son estos:
Acostumbramos a negar, rechazar y prohibir los sentimientos negativos de rabia, odio y cólera reaccionando racionalmente o furibundos.
■ Por ejemplo: Ante un hijo iracundo y rabioso por una frustración, podemos decirle: “veo que estás muy enfadado y tendrás tus motivos para estarlo.” A continuación le dejamos un tiempo para calmarse por sí mismo. Una vez calmado, podemos hablar de lo sucedido preguntando primero para conocer lo sucedido y su vivencia de ello.
■ En lugar de negar, ignorar o prohibir los sentimientos negativos de nuestros hijos, podemos atender la emoción calmándoles y después introducir la razón ayudándoles así a expresar, sentir y comprender su complejo mundo interior.
Comparamos a nuestros hijos para expresar orgullo, satisfacción y enfado. Para elogiar, motivar y para mostrar cómo deseamos que actúen.
■ En lugar de comparar, describe lo que hace tu hijo cuando actúa bien y cuando actúa mal, lo que te gusta y lo que te disgusta. Lo que debe hacerse. Lo que sientes. Los sentimientos de satisfacción y orgullo hacia uno de tus hijos es preferible expresarlos en privado. Al expresar favoritismos les estamos comparando y les hacemos daño a todos, incluido al favorito.
▶▷ Les encasillamos para halagarlos, para criticarlos, para demostrar que les conocemos bien, para justificar nuestras dificultades y las suyas, para lucirnos y para alimentar nuestro ego. También los niños se encasillan a sí mismos y unos a otros.
En su lugar de encasillar a nuestros hijos, podemos…
▷ Aceptar que nuestro hijo debe aprender nuevos roles y ayudarle a hacerlo.
▷ Tratar a nuestro hijo No como es, sino como nos gustaría que fuera.
▷No Rendirnos. No pensar que nuestro hijo ya está definido y terminado por su carácter y naturaleza y no puede cambiar.
▷ En el caso de Víctima y Agresor, enseñar al primero a defenderse y al segundo a actuar desde el respeto.
▷ Ayudar a nuestro hijo a ver que puede comportarse mejor y exigirle un cambio progresivo y dirigido por nosotros.
▷ Enseñar a los hermanos Un Nuevo Modo de Ver a su hermano.
▶▷ Cuando un hijo nuestro destaca en un área de competencia excluimos a los demás y permitimos que se excluyan ellos mismos.
▷ En lugar de excluirles, podemos tener presente que cada niño debe hacer su propio camino sin interferir en el de sus hermanos.
▶▷ Cuando los hijos se pelean podemos cometer algunos errores como…
▷ Intervenir decidiendo nosotros quién tiene razón, quién no y cómo debe actuarse.
▷ Analizar precipitadamente los hechos negando o ignorando sentimientos negativos de ambos.
▷ Atacar al agresor poniéndonos a su nivel emocional y conductual.
▷ Atender al agresor reprendiéndole por su conducta y descuidando al agredido.
▷ No permitir que expresen sus sentimientos civilizadamente y que busquen una solución por ellos mismos.
▷ Obligarles a compartir algo de su propiedad a regañadientes y contra su voluntad.
▷ Encasillarles en los papeles de Víctima y Agresor.
▷ Herirles con palabras ofensivas.
▶▷ En lugar de actuar así podemos…
▷Empezar reconociendo el enfado de los niños entre ellos.
▷Escuchar la opinión de cada niño con respeto.
▷Reconocer la dificultad del problema.
▷Apoyar a una parte cuando lo consideramos justo pero dejando que ellos intenten llegar a un acuerdo.
▷Expresar nuestro convencimiento de su capacidad para encontrar una solución aceptable para ambos.
▷Marcharnos.
▷Enseñar a cada uno a actuar más asertivamente. A la víctima, a defenderse. Al agresor/a, a perseguir sus propósitos con respeto.
▷ En su lugar podemos intervenir describiendo el riesgo existente y separar a los hermanos para más adelante hablar de lo sucedido.